Te voy a decir la verdad, hace unos años ni siquiera sabía qué era el handlettering. Y, para serte sincera, lo último que me esperaba es que empezaría a sentirme fascinada por esta forma de escribir bonito gracias a mi hija que cumplió 7 años la semana pasada.
Hace ya algún tiempo que ella empezó a hacer la transición del dibujo a las letras. Pero no se limitaba a dibujar las letras tal y como están en los cuadernillos del cole, no. Les hacía rizos, las unía de forma original y les colocaba unas sombras que les daban casi una personalidad propia.
Pero la cosa no terminó ahí.
Un día fuimos en Ámsterdam a una exposición sobre Marruecos y cuando descubrió la caligrafía árabe, llegó a casa y se puso a copiar las letras del folleto de promoción una y otra vez. No sabíamos qué ponía, pero quedaba “bonito”. Así que le introduje a las inscripciones japonesas que tenía guardadas de mi época zen y me di cuenta de que las copiaba con tanta atención que podía estar un par de horas sin levantar la cabeza del papel.
Y entonces me percaté de que cuán cierto es lo que les digo siempre a mis estudiantes durante las sesiones de práctica de escritura a mano:
«Escribe cada letra como si fuera un pequeño dibujo, porque así conectarás con esa parte del cerebro que crea arte y no juzga».
Mi hija se deja llevar creando letras bonitas porque para ella lo que está haciendo en realidad es dibujar. Y es que al usar la línea, como dice Betty Edwards, (que es uno de los elementos fundamentales del arte), el dibujo de las letras puede funcionar como un medio de autoexpresión artística.
Así que cuando estuvimos mirando posibilidades para celebrar su cumple, se me ocurrió hacer una fiesta de grafitti con una organización especializada en dar cursos de letras grafitti a los más pequeños. Y es que, como no, cada vez que pasábamos con la bici cerca de un puente con letras bonitas grafitti también teníamos que parar para admirarlas juntas. Y lo mejor de todo:la mitad de los regalos que recibió también fueros libros de HANDLETTERING, que ahora mientras ella está en el cole intento utilizar para probar lo que ella debe de estar experimentando cuando está todas esas horas dándole al handlettering.
Y, ¿qué he descubierto?
Que con el handlettering o el arte de escribir letras bonitas, me siento igual que cuando estoy dibujando. Todo fluye y esa parte del cerebro que no para de hablar, se calla por fin. Permanezco concentrada y como que la mano va sola.
Sí, exactamente lo que pasa cuando dibujo o coloreo, sólo que ahora estoy trabajando con ¡letras, frases!!!
Es justo ese estado mental el que buscamos cuando estamos escribiendo.
Así que como te podrás imaginar, te voy a recomendar que lo pruebes. Sobre todo en esos días en los que notes que no marcha tu práctica de los 10 MIN tal y como te describo en el manual PONTE LAS PILAS.
¿CÓMO VAS A EMPEZAR CON TU HANDLETTERING?
Primero, revisa tu cuaderno de práctica de escritura y subraya unas cuantas frases cortas de tus ejercicios que te llamen la atención a primera vista. En la segunda ronda, quédate con una de esas frases.
Yo me he quedado con esta: “Era dulce a la vez”.
Decide qué palabra de la frase quieres destacar. Yo voy a destacar “dulce”.
Combina mayúsculas y minúsculas
Imagínate que cae la luz desde un ángulo para visualizar las sombras que le vas a dar. Y no pasa nada porque te confundas, ¿vale? Esto es sólo un ejercicio para pasárselo bien. Yo elijo que caiga la luz desde la derecha.
Por último escoge colores u otra decoración para darle el ambiente que te tengas en mente.
Si te apetece, también puedes envolver el total en un marco o incluso algo más original.
Me ha quedado esto:
Durante todo el ejercicio, déjate llevar, ya verás que queda bonito lo hagas como lo hagas.
Además de practicar en conectarte con esa parte del cerebro que crea arte y te permite dejarte llevar, estarás ejercitándote en:
Tener paciencia contigo misma,
El desafío al empezar algo nuevo y
La perseverancia cuando las cosas no te salen.
Vamos, precisamente los tres elementos que necesitas cuando estás empezando a escribir cualquier proyecto de ficción.
Pero lo mejor de todo es que descubrirás la importancia de la relación entre los elementos de un total y cómo esos vínculos se establecen sin darte cuenta entre las diferentes partes de tu total y dan lugar a una “unidad” que es la dota de sentido a tu creación.
Y eso te servirá para cuando escribes del modo en el que yo siempre te indico:
Dejándote llevar.
Pues aunque a primera vista los elementos de tu relato o novela en tu borrador cero te parezcan inconexos, tu insconsciente habrá creando vínculos que harán que sí exista una unidad entre todas las partes.
Y esa unidad es la belleza que tu lector experimentará al leerte en la versión final.
Así que manos a la obra y anímate a probar.
Seguro que te enganchas como yo.
Pero sobre todo, recuerda, no hace falta que sea perfecto. No eres una diseñadora gráfica. En internet encontrarás muchos tutoriales con técnicas y maravillas, pero no dejes que te bloqueen con la perfección.
Ten siempre presente, que lo haces por el placer de practicar, para seguir sintiéndote como te sientes cada vez que creas belleza durante un ratito al día de tu vida cotidiana.
Josplás! Pues es algo que yo hago y que pensaba era como infantil, y vienes tú ha decirme que hay libros sobre esto y que se llama handlettering
Pues, sí, Kristina, lo voy a intentar, nada me seduce tanto como la búsqueda de la belleza y colorearla…