He invitado a la especialista en SnailMail: Little Clementina, para que te escriba una carta sobre cómo puedes aprovechar este verano para practicar tu escritura con cartas bonitas en vez de mails.
«Querida suscriptora de CREANDO:
Soy Miryam, pero cuando mis manos trabajan el papel soy Little Clementina, una apasionada de las cartas y de las letras bonitas.
Hablar de escribir cartas en esta era dominada por la tecnología puede sorprenderte. Pero a diario, miles de ellas viajan a gran velocidad. E-mails se envían y se reciben por todo el mundo. Largos, breves, simples o con documentación importante. Sin lugar a dudas siempre hemos tenido la necesidad de comunicarnos. Lejos quedan ya las esperas eternas. La velocidad de los e-mails ha desplazado a las cartas de papel, las de escritura caligráfica, las de sellos de coleccionar y matasellos de acariciar, las de releer y suspirar.
En mi opinión, la carta manuscrita, enviada por correo o entregada en mano, engrandece las relaciones. Escribir cartas nos hace sentir únicos. Quien escribe lo hace con el corazón, contando sentimientos, historias, deseos. Y llenará de expectación a la persona que la recibe en su buzón, entre propaganda y facturas. Esa carta bien escrita, tan bella por fuera como por dentro.
El Snail mail, happy mail, correo bonito o carta manuscrita tiene aires renovados donde belleza y creatividad se unen. Sobres de colores que bien podrían dibujar un arco iris, decorados con sellos, cintas de washitapes, direcciones y remites escritos a mano con plumilla, rotulador o bolígrafo, sellos de lacre, cordeles… dan paso a las cartas más bellas. Cuartillas, tarjetas, decoradas o dulcemente perfumadas, componen cartas que no han perdido su esencia.
A menudo, los talleres que imparto sobre correo están enfocadas a trabajar el papel, a elaborar sobres, a disfrutar doblando y plegando a mano. En ninguno pierdo la ocasión de dedicar un tiempo a escribir. Y es aquí cuando tomo los consejos que Kristina que sabiamente va regalando. Animo a que a escribir perdiendo el miedo al folio en blanco, a hacerlo de seguido, sin parar, sin corregir (eso llegará después o no).
Que los destinatarios sean las personas que quieres, o a las que ya no están contigo y a las que se te quedaron tantas cosas por contar…u otras que no conoces o ficticias…llegar a todo lo que tu imaginación alcance. Algunas cartas las echarás al buzón, otras las guardas en un cajón o las das en mano como el mejor de los regalos. Algunas serán una simple nota con un “gracias”, un “te quiero” o” felicidades”. Otras tendrán folios llenos de tus palabras, las que colocadas a tu criterio entusiasmarán a quien te lee. Familia y amigos que saben de tu sueño, el de escribir para miles de lectores.
Te animo a escribir cómo aconseja Kristina, desde lo más fácil, desde lo que requiere poco tiempo. El verano es el mejor momento para enviar postales. Llevan en pocas palabras la esencia de unas vacaciones, un viaje o los lugares cotidianos. Seguro que el calor sofocante, la brisa del mar, el olor a campo recién segado te inspira a comenzar a escribir. Es tan poco el espacio destinado para ello que en seguida te verás buscando un buzón.
Seguro que después llegarán escenas en tus escritos donde una carta sea protagonista en tus novelas, cuentos, relatos… Como no podría ser de otra manera, en mis novelas favoritas las cartas tienen su protagonismo, El baile de Irène Némirovsky, El último encuentro de Sandor Marai o 84 Charing Cross Road, donde yo también quise sentirme Hellene Hanff.
No quiero despedirme sin deciros que me llenó de dicha la propuesta de Kristina de escribir una carta para CREANDO, seguiré aprendiendo de ella. Y continuaré escribiendo cartas sobre todo porque siento que soy parte de la historia, de la que hace que las cosas hermosas y hechas a mano no se pierdan en el tiempo.
No olvides que tu carta debe invitar a una respuesta porque recibir cartas también nos llena de alegría. Yo estaré feliz también si visitáis mi cuenta de Little_clementina en Instagram o mi blog y cualquier comentario, por pequeño que sea, lo recibiré como la carta más esperada.
Un cordial saludo,
Little Clementina
¿Se te ha ocurrido ya a quién le vas a escribir una carta este verano?
Te leo en los comentarios.
Soy Miryam Martín, una apasionada del handmade, de las cosas hechas despacio. Disfruto trabajando el papel, doblarlo y plegarlo a mano con delicadeza para formar detalles con encanto. Crear Little Clementina fue dar forma a un sueño donde los sobres son protagonistas. Siempre me han gustado las cartas, las que se guardan para siempre, las que se escriben con letra bonita.
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